Con el Diseño Humano como nuestra brújula, aprenderás a organizar tu día de manera que te permita dirigir-te con claridad y eficacia, manteniendo un equilibrio saludable entre la acción y la reflexión.
1. Conociendo tu naturaleza proyectora:
Antes de embarcarnos en la transformación de tu rutina, es esencial comprender en profundidad tu tipo áurico de Proyectora. Tu habilidad para ver “la película completa” y dirigir con sabiduría es tu súper poder único. No tengas miedo de ir a lo profundo, ese es otro de tus dones y no tenés porqué esconderlo más.
2. Creando espacios para la reflexión:
Como Proyectora, la reflexión es tu aliada más poderosa. Dedica tiempo por semana a la planificación estratégica, con foco y proyección. Establece un espacio sagrado donde puedas visualizar tus objetivos y trazar el camino hacia ellos con claridad.
3. Estableciendo prioridades con sabiduría:
Utiliza tu discernimiento natural para identificar las tareas más importantes. Prioriza aquellas actividades que te permitan ofrecer tu mayor contribución y dejar tu huella única en el mundo y luego sigue por el resto. Si ya venís indagando sobre planificación del tiempo, seguro tendrás un plan de acción y una planificación semanal que te ayudará a hacer seguimiento de tus objetivos mensuales.
4. Dirigiendo con autoridad y amabilidad:
Como líder natural, aprovecha tu capacidad para influir en los demás con gentileza y compasión. Siempre, siempre, siguiendo tu estratégia: espera la invitación. Inspira a tu equipo con tu visión y orientación, fomentando un ambiente de colaboración y respeto mutuo.
Respeta y chequea todas tus decisiones con tu autoridad, ella es quien te va a decir si esa invitación es correcta o no.
5. Manteniendo un ritmo sostenible:
Caer en la trampa del exceso de trabajo y la sobreexigencia es muy tentador para nosotras, ya que vinimos en un mundo muy “generador” donde siempre hay que hacer un poco más. Aprende a escuchar las señales de tu cuerpo y mente, y establece límites claros para proteger tu energía y bienestar. Volvé a tu espacio seguro, a tu bunker, para recargar tu energía.
6. Conexión y comunicación:
Fomenta relaciones significativas y auténticas con tus colegas y colaboradores. Mantén canales abiertos de comunicación y asegúrate de escuchar activamente las ideas y perspectivas de los demás. Recorda que para que nos inviten a “algo”, tienen que saber “qué” hacemos. También nos damos cuenta cuando alguién no está siendo honesto con nosotras, asique ojo.
Hay mucha data de nuestros perfiles y canales que podemos descubrir en este punto y lo vemos en mi acompañamiento 1:1 “Como alinear tu negocio a tu vida a través de tu Diseño Humano”.
7. Flexibilidad y adaptabilidad:
Aunque tienes una visión clara de hacia dónde te diriges, practicar la flexibilidad es clave. Permanece abierta a nuevas oportunidades y ajusta tu curso según sea necesario para maximizar tu impacto y crecimiento.
8. Celebrando siempre:
No te olvides de celebrar tus éxitos y avances a lo largo del camino. Reconoce tus habilidades y logros únicos como Proyectora, y date el crédito que mereces por tu arduo trabajo y dedicación.
Al alinear tu rutina de trabajo con tu naturaleza Proyectora, te re-encontrarás con todo tu potencial para liderar con sabiduría y compasión. ¡El mundo espera tu brillantez única y tu contribución invaluable!